Los rayos UV penetran en el cuero cabelludo y debilitan los folículos pilosos (concavidad bajo la piel en la que crece cada pelo). Esto conlleva una deshidratación que modifica su estructura, porque en general, el pelo necesita entre el 15% y el 17% de agua. Por eso en los casos de exposición excesiva, se cuartea la melena y, como resultado, se obtiene un cabello seco y áspero.
El sol que recibimos, por ejemplo en la playa, es más dañino que el de la ciudad o la montaña, porque se conjuga con otros factores. El salitre tiene efecto lupa y atrae los rayos solares, el viento arrastra partículas que producen mayor sequedad, y los minerales marinos producen oxidación y una destrucción progresiva del cabello. En los casos de piletas, el cloro puede afectar a la coloración.
Por eso, te aconsejamos usar sombreros, pañuelos o gorras si estás al sol, sobre todo si tenés el pelo mojado. Existen productos destinados a proteger el pelo que se deben aplicar antes de la playa o de entrar a la piscina. Si te sumergís, cuando salgas enguajate la cabeza y reaplicá el protector.
MÁS TIPS PARA PROTEGER TU PELO EN VERANO
– Como el calor suma daño, hay que tratar de reducir el uso del secador y la planchita, y preferir el secado natural. Para peinar son preferibles los peines de dientes anchos que traccionan menos el pelo. Hay que hacerlo cuando el pelo esté húmedo y no demasiado mojado.
– Antes de exponerse al sol, se aconseja preparar el pelo con distintos cuidados. Por ejemplo, un tratamiento nutritivo tiene un efecto encapsulador y protector, que aisla el pelo del posible daño.
– Aplicá productos en spray para pelo largo, y en emulsión o crema sin enjuague,para pelo corto, que contengan FPS 30 o más y filtros anti UVA y UVB. Colocar media hora antes de la exposición, repitiendo cada dos horas y al salir del agua. Antes, mojar el pelo con agua de la canilla para que este absorba menos salitre y cloro. Después del mar o la pileta, enjuagarlo con agua dulce y aplicar una crema reparadora que se debe dejar actuar un rato antes de enjuagar.
– Terminadas las vacaciones se recomiendan baños de crema semanales. Para teñirlo, en lo posible esperar a la recuperación del pelo, que se da cuando se ve más sedoso y resistente. Una o dos veces por semana recurrir a champús y acondicionadores con efecto détox, con manteca de karité, provitaminas, ceramidas, aminoácidos, proteína de trigo y extractos vegetales marinos. Y luego colocar una mascarilla o leche reparadora; cubrir con una toalla caliente y húmeda, y dejar actuar 20 minutos antes de enjuagar. Consultar con un dermatólogo la posible ingesta de cápsulas de aminoácidos específicos. Por supuesto, llevar una alimentación rica en fibras, vitaminas y proteínas también será clave para recuperar tu cabello.
Fuente: Diario La Nación