El tratamiento de las manchas oscuras en la piel es posible gracias a la utilización de peelings despigmentantes o luz pulsada intensa.
El tono se empareja y mejora su textura y luminosidad. Se complementa el tratamiento con cremas domiciliarias y se indica el correcto cuidado de la piel para reducir la posibilidad de aparición de nuevas manchas.